HISTORIA

viernes, 9 de agosto de 2013

50 AÑOS HACIENDO BAILAR A VENEZUELA

La Orquesta de Porfi Jiménez debutó oficialmente el 31 de diciembre de 1963, en el salón Naiguatá del Hotel Tamanaco, como una agrupación de original estilo impuesto por su entonces joven director, y a lo largo de más de 50 años se ha mantenido como una de las más importantes del país, con temas que hicieron conocer a su creador no solo en Venezuela, sino también en Europa, Estados Unidos y América Latina.  

Porfi Jimenez, cuya trayectoria fue internacionalmente reconocida en el seno de las Naciones Unidas en Nueva York en 2007, debutó en Venezuela como trompetista en 1954, cuando se presenta con la orquesta de Rafael Minaya en el entonces Club Casablanca de Caracas. Después pasa por las orquestas de Pedro José Belisario, Billo Frómeta y Los Peniques, entre otras.  

Paralelamente, su calidad como arreglista va abriéndole puertas en ese campo, y en 1959 establece una oficina con el destacado pianista, locutor y compositor Aníbal Abreu, con quien comparte la pasión por este difícil arte.  



Los arreglos y la dirección musical de Porfi Jiménez
acompañaron los éxitos de Felipe Pirela

Su fama en este campo lo convierte en director musical del sello Velvet, donde son reconocidos los trabajos que realiza para artistas nacionales, como el famosísimo bolerista de América, Felipe Pirela, Mirla Castellanos, el Trío Venezuela,  Cherry Navarro, Miguel Buitriago y Estelita del Llano, e internacionales como Blanca Rosa Gil, Sophy y Rolando La Serie, entre otros.  



      Con Rolando La Serie, en 1962
(Foto Ciclayano)

Más tarde se desempeña como director de las orquestas de Radio Caracas Televisión y Venevisión, hasta 1963, cuando debuta con su propia agrupación. Una orquesta que desde el principio llama la atención tanto por el estilo ágil de su joven director, quien combinaba el canto, la dirección, el baile y los solos de trompeta, como por la calidad de su sonido, que le mereció de la crítica el calificativo de “la orquesta más afinada de Venezuela”.



Con José Pagé, gerente del sello Velvet, ´
y Manolo Guilarte, cantante de la orquesta
(1964)

El primer disco grabado por la joven orquesta  contó con la participación de los cantantes Kico Mendive y Felipe Pirela,  quien, en agradecimiento por el impulso que los arreglos de Porfi le dieran a su trayectoria, se ofreció espontáneamente a cantar los boleros.  

El segundo disco, “A bailar con Porfi”, colocó a la orquesta al lado de las más importantes agrupaciones del momento en el país, como la Billo y Los Melódicos, entre otras.

Por el prestigio que su trabajo le reporta ya en esa época, Porfi es escogido para constituir y dirigir la agrupación que habría de alternar con las Estrellas de Fania, en su debut en Venezuela, en 1974. Fue la base del Trabuco Venezolano, constituido después por Alberto Naranjo, y los cantantes fueron Coco Ortega, Chico Salas y Carlin Rodriguez. “Fue la primera big band que se formó en Venezuela y me siento muy orgulloso de haber participado en ella”, afirmó Carlín en una oportunidad.  

La Orquesta de Porfi Jimenez recibió el segundo lugar en el primer y único Festival de Orquestas realizado en Venezuela en 1975, y el reconocimiento de países como Colombia –donde le otorgan el Congo de Oro en los carnavales del 67-, Panamá, Curazao, Estados Unidos y Puerto Rico –donde la califican en 1968 como la mejor agrupación venezolana que se había presentado en la isla.  

Con su orquesta en Variedades 22 (c. 1965)




En La Hora Tissot,
en RCTV (1963)

 Guaracha, guaguancó, bolero, son, cumbia, constituyen, entre otros ritmos, el repertorio bailable de Porfi. Pero es sobre todo lo que mas tarde se conocerá como la salsa lo que atrapa su interés como artista, y él lo explicó alguna vez: En ella encontraba el vinculo que lo conectaba con su primigenia y verdadera pasión: el jazz.



Con su orquesta en RCTV. La estética del escenario
señala la entrada del nuevo concepto de la imagen
que marcan los 70 (1974)

El final de los años 70 marca un cambio para las orquestas de música latina bailable, y la emergencia del merengue. En ese contexto, Porfi Jiménez se orientó hacia ese ritmo que conocía desde su infancia, y comienza para su orquesta en una nueva etapa que le deparará otras muchas satisfacciones.  

Fue con el disco “Veinte años”, producido por él mismo, en el que incluye clásicos como “Dolores” y “Se hunde el barco” (hoy convertido en himno en la pelea Caracas-Magallanes), que le merecieron el Disco de Oro 1984.

Entre sus numerosas piezas, cabe destacar además “La negra Celina”, que 27 años después de su exitoso estreno sigue siendo solicitada en todas las fiestas, así como “Chivo Florete” y “Consentida”.

Con Willie Colon, en la visita de Fania All Stars

Pero destaca sobre todo, en esta línea, “Culucucú”, que constituyó un récord en 1986/87, con más de 500 mil copias vendidas y ganadora de dos Discos de Oro y uno de Platino. También sonaron fuertemente de ese LP “Llévame contigo”, “Muévete, muévete” y “La hierba se movía”.

Más tarde vendrán otras como “Ella me vacila”, “Merequetengue pa ti”, que le reportarán numerosos premios y reconocimientos, y un nuevo prestigio dentro y fuera del país, convirtiendo a la orquesta de Porfi Jiménez en invitada especial en los carnavales de Colombia e Islas Canarias.    

Con Julio Andrade, en Nueva York, en ocasión
del homenaje de la ONU (2008)

Tras la desaparición física del maestro Porfi Jiménez, los integrantes de su orquesta decidieron seguir haciendo bailar a Venezuela con la calidad de los arreglos de su célebre director, y novedosas composiciones que, sobre la base de su estilo, aportan nuevos y jóvenes arreglistas y compositores del país a esta agrupación que definitivamente se quedó en el gusto de los venezolanos.  

Actualmente, la agrupación cuenta con la dirección musical del reconocido pianista Sammy Infante, y la doctora Myriam Williams en la gerencia y producción general. Contactos: Teléfonos 0212 4823764 - 04141348257. email: porfiorquesta@yahoo.es